Para ilustrar productos, servicios y posts, nos vemos en la necesidad de recurrir a los bancos de imágenes. Preferimos, lógicamente, aquellas imágenes gratuitas que encontramos en la red. El viejo dicho de "una imagen vale más de mil palabras" sigue vigente.

Está demostrado que los usuarios de Internet (en webs, blogs y redes sociales) responden y se relacionan más cuando una imagen les muestra aquello a lo que hacemos referencia. El problema reside en la legitimidad de las imágenes que recogemos de Internet. Por eso, queremos descubriros los principales bancos de imágenes existentes y las buenas prácticas que hemos de tener en cuenta cuando hacemos uso de ellas.

Existe, además, el típico banco de imágenes que alterna el servicio gratuito con el premium, que nos da derecho a más opciones, por lo que es necesario comprobar siempre qué licencias se otorgan. Algunos ejemplos:

• Pixabay: es un excelente banco de imágenes gratuitas (más de 500.000) en español, incluidos vectores, fondos publicados y fotografías bajo licencia Creative Commons. Existe la opción de "invitar a café" a los autores de las fotografías, pero no es obligatoria. La única advertencia: en algunas búsquedas, aparecen imágenes pertenecientes a Shutterstock, de manera que veremos su logo sobreimpreso.
• MorgueFile: un banco de imágenes que se nutre de los propios usuarios, que van subiendo a la plataforma sus propias fotografías, por lo que no siempre tienen una excelente calidad, al pertenecer a fotógrafos amateurs. En contrapartida, podemos encontrar fotografías que se salen de lo común.
• Unsplash: en este momento, una de las mejores opciones para conseguir imágenes gratuitas. Podemos usarlas para todas aquellas publicaciones que necesitemos.

En cuanto a las buenas prácticas, aunque los bancos de imágenes mencionados nos ofrecen la libertad de utilización, siempre es necesario y recomendable indicar la fuente y el nombre del autor. A todos nos gusta ver recompensado nuestro trabajo.